
Un espacio de mutua-ayuda para Padres que hemos sufrido la pérdida de uno o más hijos. Te invitamos a compartir experiencias,reflexiones y fortalezas.
"BIENVENIDO"
No es fácil decir estas palabras:
BIENVENIDO (A) GRACIAS POR SU VISITA.
Sabemos que si nos visitas es porque compartimos el mismo duelo: La partida de un hijo (a) (s).
ESTE ESPACIO FUE CREADO COMO UN LEGADO DE AMOR y ES PARA COMPARTIR "Un Proceso para la Transformación del Dolor en Crecimiento Existencial".
PEDIMOS AL CREADOR QUE ALGUNA DE LAS PALABRAS QUE LEAN, EN ÉSTE, LES AYUDE Y LES DE ALIENTO PARA CONTINUAR:
" AMIGA (O) DEL CAMINO, UN ÁNGEL NOS UNE".
BIENVENIDO (A) GRACIAS POR SU VISITA.
Sabemos que si nos visitas es porque compartimos el mismo duelo: La partida de un hijo (a) (s).
ESTE ESPACIO FUE CREADO COMO UN LEGADO DE AMOR y ES PARA COMPARTIR "Un Proceso para la Transformación del Dolor en Crecimiento Existencial".
PEDIMOS AL CREADOR QUE ALGUNA DE LAS PALABRAS QUE LEAN, EN ÉSTE, LES AYUDE Y LES DE ALIENTO PARA CONTINUAR:
" AMIGA (O) DEL CAMINO, UN ÁNGEL NOS UNE".
(Si tienen algún comentario, les invitamos a realizarlo, en la parte de los comentarios o en los foros, accediendo a través de los links)
A DONDE IR:
7 PASOS PARA LLEVAR UN PROCESO EN EL DUELO: Proceso de Duelo
https://sites.google.com/site/nuestroangelnosune/
Compartimos nuestros Testimonios y experiencias vividas: Compartiendo nos ayudamos mutuamente, ya que, como personas que estamos viviendo el duelo por la muerte de nuestro hijo (a). Es precisamente ayudando a un hermano que sufre donde se encuentra la respuesta. FORO - CHAT(REGISTRARSE/MIEMBROS):
http://padresenduelounangel.foroactivos.net/f10-nuestra-experiencia-vivida
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Foro para compartir nuestras experiencias
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miércoles, 29 de abril de 2009

Padres en Proceso de Duelo es un espacio para compartir reflexiones y para escribir en los foros sus experiencias vividas ... Te invitamos a formar la comunidad de ayuda mutua, para padres que están en proceso de duelo, por la pérdida de uno o más hijos que comparten con nosotros está nueva etapa de nuestra vida.
lunes, 27 de abril de 2009
Cómo ayudarse cuando fallece un hijo. . .
La muerte de un hijo es probablemente la experiencia más dolorosa y difícil que una
persona pueda experimentar. Viola todo lo que podemos esperar del curso natural de los hechos.
“Los hijos deben sobrevivir a sus padres,” decimos. En la mayoría de los casos, lo hacen. ¿Pero qué hacemos cuando nos encontramos dando la despedida final a un hijo? ¿Entonces qué? ¿Qué
podemos hacer para ayudarnos a nosotros mismos en circunstancias tan espantosas?
Sienta Su Dolor
Al menos al principio, verá que no puede aceptar que su hijo realmente haya muerto. Esto es
comprensible y normal. Dése tiempo para absorber este duro hecho y comience a reconocer sus
numerosas implicancias. Permítase experimentar su profunda pena en todas sus dimensiones —
físicas, psicológicas, sociales y espirituales. Si puede, hágalo gradualmente y en pequeñas dosis.
Pensar en su hijo o hablar de él o ella con otras personas a veces puede resultar doloroso. Otras,
puede ser de gran consuelo. No tema llorar cuando lo necesite. Las lágrimas son curativas. La
profundidad del dolor que siente en este momento se relaciona directamente con la profundidad de la relación que compartió con ese hijo o hija. El dolor es el precio que pagamos por haber amado, porque al hacerlo, nos hemos permitido ser vulnerables a la pérdida.
Cómo Sobrellevar Su Dolor
Trate de manejar su pérdida y su dolor, no dominarlo. Concéntrese en el presente. No es necesario que resuelva todo su futuro en este momento. Viva un día por vez — pero no trate de hacer frente a una hora si eso es demasiado para usted. El tiempo por sí mismo no cura, pero es lo que nos puede ayudar a recuperarnos y crecer.
Recuerde sus necesidades de alimento, agua, descanso y ejercicio. El cuidado de sí es fundamental para proveer los recursos que necesitamos para vivir.
Es necesario que encuentre su propia manera de hacerlo después de la muerte de su hijo.
Sobrellevar una pérdida tan horrible es una experiencia muy individual. Piense en qué lo ayudó
cuando se enfrentó con otras pérdidas más pequeñas en otros momentos de su vida.
Apoyo de la Familia y Amigos
Mantenga relaciones con familiares cercanos y amigos. En este momento necesita de todo su apoyo, aun si cree que no podrán hacer mucho por usted. No dude en pedirle ayuda a sus amigos cuando lo necesita. Los verdaderos amigos se alegrarán de poder ayudar en forma práctica y de distintas maneras. Si alguien dice o hace algo que no es útil o incluso resulta doloroso, usted puede expresar sus sentimientos y explicar qué le puede servir de ayuda. No sufra en silencio.
Esté atento.
La mayoría de las personas tienen buenas intenciones, pero a veces no saben qué hacer o qué decir. En realidad, todos tenemos mucho que aprender sobre las reacciones ante la muerte de un hijo. Es probable que se encuentre enseñando esas lecciones, lo quiera o no. Sea amable, pero firme; enséñele a la gente a ser más comprensiva y útil. Cuando les da permiso, los amigos verdaderos agradecen las oportunidades de compartir con usted los recuerdos que guardan de su hijo o hija — y usted también se beneficiará de ello, porque esos recuerdos enriquecerán el legado de su hijo en su propia mente y corazón.
Extraiga Fuerza de Otros Padres en Iguales Circunstancias
Con frecuencia, los padres que han perdido un hijo señalan que otros padres que vivieron
circunstancias parecidas fueron la ayuda más efectiva. “Conocían el dolor. Sabían qué decir y qué
no decir.” Puede ser de ayuda encontrar un grupo de apoyo local para padres que han perdido un
hijo pidiendo referencias en funerarias, programas hospitalarios o instituciones religiosas de su área.
Concéntrese en el Legado de Su Hijo o Hija
Muchos padres encuentran muy útil concentrarse no sólo en lo que han perdido sino también en lo que ha significado y en lo que continúa significando su hijo. Reflexionan sobre la riqueza que ese hijo ha aportado a sus vidas. Puede hacer esto pensando en el lugar y en el significado especial que su hijo o hija ocupa para usted. Su vida es más rica porque su hijo vivió.
Su relación con su hijo o hija será diferente ahora — esa es la cruda realidad que trae la muerte. Sin embargo, su hijo tendrá siempre un lugar en su corazón — eso jamás cambiará. Aunque su hijo ya no viva, usted lo podrá amar toda su vida. El amor en la separación no es menos real que el amor en la presencia. Su hijo lo ayudó a que usted sea quien es ahora. El legado de su hijo puede incluso ayudarlo a crecer; continúa teniendo profundos efectos sobre su propia vida y en la vida de quienes lo rodean.
Cómo Conmemorar la Vida de Su Hijo
Puede conmemorar la vida de su hijo de distintas maneras. Algunos padres escriben breves poemas o cuentos, otros llevan un diario de recuerdos, crean un jardín, hacen donaciones o crean una beca en memoria de su hijo. Otros padres la conmemoran comprando o haciendo un regalo especial en el día de cumpleaños de ese ser, en las fiestas religiosas o en otras ocasiones festivas. Luego donan ese regalo a un joven pobre o a una organización benéfica en memoria de su hijo. De esta manera y de tantas otras, puede alimentar una conexión importante con su hijo o hija y mantener viva su memoria en usted. A menudo, puede ayudarse mejor aceptando el apoyo y amor de aquellos a quienes ama y que conocieron y amaron a su hijo o hija, como también ayudando a quienes se dirigen a usted en busca de apoyo y amor. Todos los que amaron a su hijo serán afectados por su muerte. Todos ellos necesitan sentirse amados, seguros y que son parte importante de su familia. Los abrazos y las lágrimas compartidos son la mejor manera de decir, “somos todavía una familia, el hijo que ya no está sigue siendo parte de nuestra familia y a pesar de todo, esto seguirá siendo lo más importante.”
Acerca del Autor
El Dr. Charles A. Corr es profesor emérito de la Universidad Edwardsville del sur de Illinois y ex-presidente (1989-1993) del Grupo Internacional de Trabajo sobre la Muerte, el Duelo y las Personas en Agonía. Entre las publicaciones profesionales del Dr. Corr se incluyen 22 libros y más de 80 artículos y capítulos sobre una amplia variedad de temas relacionados con la muerte.
Este folleto y los demás recursos fueron elaborados por los proveedores de servicios de
Memorial®. DignityMemorial.com
persona pueda experimentar. Viola todo lo que podemos esperar del curso natural de los hechos.
“Los hijos deben sobrevivir a sus padres,” decimos. En la mayoría de los casos, lo hacen. ¿Pero qué hacemos cuando nos encontramos dando la despedida final a un hijo? ¿Entonces qué? ¿Qué
podemos hacer para ayudarnos a nosotros mismos en circunstancias tan espantosas?
Sienta Su Dolor
Al menos al principio, verá que no puede aceptar que su hijo realmente haya muerto. Esto es
comprensible y normal. Dése tiempo para absorber este duro hecho y comience a reconocer sus
numerosas implicancias. Permítase experimentar su profunda pena en todas sus dimensiones —
físicas, psicológicas, sociales y espirituales. Si puede, hágalo gradualmente y en pequeñas dosis.
Pensar en su hijo o hablar de él o ella con otras personas a veces puede resultar doloroso. Otras,
puede ser de gran consuelo. No tema llorar cuando lo necesite. Las lágrimas son curativas. La
profundidad del dolor que siente en este momento se relaciona directamente con la profundidad de la relación que compartió con ese hijo o hija. El dolor es el precio que pagamos por haber amado, porque al hacerlo, nos hemos permitido ser vulnerables a la pérdida.
Cómo Sobrellevar Su Dolor
Trate de manejar su pérdida y su dolor, no dominarlo. Concéntrese en el presente. No es necesario que resuelva todo su futuro en este momento. Viva un día por vez — pero no trate de hacer frente a una hora si eso es demasiado para usted. El tiempo por sí mismo no cura, pero es lo que nos puede ayudar a recuperarnos y crecer.
Recuerde sus necesidades de alimento, agua, descanso y ejercicio. El cuidado de sí es fundamental para proveer los recursos que necesitamos para vivir.
Es necesario que encuentre su propia manera de hacerlo después de la muerte de su hijo.
Sobrellevar una pérdida tan horrible es una experiencia muy individual. Piense en qué lo ayudó
cuando se enfrentó con otras pérdidas más pequeñas en otros momentos de su vida.
Apoyo de la Familia y Amigos
Mantenga relaciones con familiares cercanos y amigos. En este momento necesita de todo su apoyo, aun si cree que no podrán hacer mucho por usted. No dude en pedirle ayuda a sus amigos cuando lo necesita. Los verdaderos amigos se alegrarán de poder ayudar en forma práctica y de distintas maneras. Si alguien dice o hace algo que no es útil o incluso resulta doloroso, usted puede expresar sus sentimientos y explicar qué le puede servir de ayuda. No sufra en silencio.
Esté atento.
La mayoría de las personas tienen buenas intenciones, pero a veces no saben qué hacer o qué decir. En realidad, todos tenemos mucho que aprender sobre las reacciones ante la muerte de un hijo. Es probable que se encuentre enseñando esas lecciones, lo quiera o no. Sea amable, pero firme; enséñele a la gente a ser más comprensiva y útil. Cuando les da permiso, los amigos verdaderos agradecen las oportunidades de compartir con usted los recuerdos que guardan de su hijo o hija — y usted también se beneficiará de ello, porque esos recuerdos enriquecerán el legado de su hijo en su propia mente y corazón.
Extraiga Fuerza de Otros Padres en Iguales Circunstancias
Con frecuencia, los padres que han perdido un hijo señalan que otros padres que vivieron
circunstancias parecidas fueron la ayuda más efectiva. “Conocían el dolor. Sabían qué decir y qué
no decir.” Puede ser de ayuda encontrar un grupo de apoyo local para padres que han perdido un
hijo pidiendo referencias en funerarias, programas hospitalarios o instituciones religiosas de su área.
Concéntrese en el Legado de Su Hijo o Hija
Muchos padres encuentran muy útil concentrarse no sólo en lo que han perdido sino también en lo que ha significado y en lo que continúa significando su hijo. Reflexionan sobre la riqueza que ese hijo ha aportado a sus vidas. Puede hacer esto pensando en el lugar y en el significado especial que su hijo o hija ocupa para usted. Su vida es más rica porque su hijo vivió.
Su relación con su hijo o hija será diferente ahora — esa es la cruda realidad que trae la muerte. Sin embargo, su hijo tendrá siempre un lugar en su corazón — eso jamás cambiará. Aunque su hijo ya no viva, usted lo podrá amar toda su vida. El amor en la separación no es menos real que el amor en la presencia. Su hijo lo ayudó a que usted sea quien es ahora. El legado de su hijo puede incluso ayudarlo a crecer; continúa teniendo profundos efectos sobre su propia vida y en la vida de quienes lo rodean.
Cómo Conmemorar la Vida de Su Hijo
Puede conmemorar la vida de su hijo de distintas maneras. Algunos padres escriben breves poemas o cuentos, otros llevan un diario de recuerdos, crean un jardín, hacen donaciones o crean una beca en memoria de su hijo. Otros padres la conmemoran comprando o haciendo un regalo especial en el día de cumpleaños de ese ser, en las fiestas religiosas o en otras ocasiones festivas. Luego donan ese regalo a un joven pobre o a una organización benéfica en memoria de su hijo. De esta manera y de tantas otras, puede alimentar una conexión importante con su hijo o hija y mantener viva su memoria en usted. A menudo, puede ayudarse mejor aceptando el apoyo y amor de aquellos a quienes ama y que conocieron y amaron a su hijo o hija, como también ayudando a quienes se dirigen a usted en busca de apoyo y amor. Todos los que amaron a su hijo serán afectados por su muerte. Todos ellos necesitan sentirse amados, seguros y que son parte importante de su familia. Los abrazos y las lágrimas compartidos son la mejor manera de decir, “somos todavía una familia, el hijo que ya no está sigue siendo parte de nuestra familia y a pesar de todo, esto seguirá siendo lo más importante.”
Acerca del Autor
El Dr. Charles A. Corr es profesor emérito de la Universidad Edwardsville del sur de Illinois y ex-presidente (1989-1993) del Grupo Internacional de Trabajo sobre la Muerte, el Duelo y las Personas en Agonía. Entre las publicaciones profesionales del Dr. Corr se incluyen 22 libros y más de 80 artículos y capítulos sobre una amplia variedad de temas relacionados con la muerte.
Este folleto y los demás recursos fueron elaborados por los proveedores de servicios de
Memorial®. DignityMemorial.com
miércoles, 15 de abril de 2009
Duelo por suicidio
Duelo por suicidio
Si la muerte trae consigo un impacto brutal que conmociona todas las áreas del ser humano, cuando ella es el resultado de un suicidio, el impacto adquiere una dimensión mas complicada por la connotación de culpabilidad, estigma y verguenza que ocasiona en el grupo familiar.Si bien, el proceso de duelo ocasionado por un suicidio sigue las mismas fases que cualquier otro, el peligro es que el elemento de culpabilidad ligado a todo suicidio retrase y altere la sana elaboración del proceso.Ante toda muerte el funeral se convierte en un elemento importante para dar un curso sano a la elaboración del duelo, no sólo porque en él la familia se confrinta con la realidad de la muerte, sino porque es allí donde se reciben los elementos básicos de apoyo. En el caso del suicidio puede ser normal ver que por diversas causas, entre las cuales priman las morales y los prejuicios que tras ellas se esconden, no se recibe todo el apoyo que se esperaría.Nos guste o no, la muerte por suicidio trae un estigma de deshonra ligado a ella.Los estudios muestran que los que tienen que soportar la muerte por suicidio suelen experimentar una depresión más profunda y mayores problemas de índole físico, que aquellos cuyos seres queridos fallecieran por otras causas.Quizás,como ya anotamos antes, la principal dificultad radica en los sentimientos de culpa. No en vano los estudiosos del tema han llegado a sostener que justamente uno de los objetivos que se propone quien se quita la vida es provocar el sentimiento de culpa en aquellos que lo rodeaban, pues quien toma tal determinación se encuentra embargado por la frustración y la rabia y quiere provocar aflicción en aquellos que, supuestamente deberían haberle prestado ayuda y, a su juicio, no lo hicieron.De este modo quien se suicida tendría tal intención de castigar a su familia, que no duda en quitarse la vida con el fin de conseguirlo. Por supuesto, hay quienes asumen que, el propósito del suicidio sería librarse a sí mismo y a la familia de dolores mayores a los que trae la pérdida de un ser querido.No importa cuáles argumentos hayan conducido a la persona a tomar tan fatal determinación, lo importante ahora no es lo que se crea o las explicaciones que se puedan tejer, pues es una de las tragedias que nunca se puede explicar o entender por completo y, como ha quedado dicho, ningún corazón quebrantado se cura con razonamientos y explicaciones.Realmente no se puede entender el pasado, pero eso ahora no debe tener mayor importancia, pues lo escencial es que aprendamos de ese acontecimiento trágico lo que necesitabamos saber sobre nosotros, sobre Dios y sobre la vida misma. Ante esto, lo mejor que podemos hacer no es encerrarnos en la pena, sino buscar apoyo en las personas más allegadas que nos permitan hablar, llorar y aun sufrir con ellas, dando lugar a la manifestación de nuestros sentimientos de rabia, frustración y autocondena, tambien es de gran ayuda buscar un grupo de apoyo y mutua ayuda y así compartir lo que sucede con otros padres y madres que están pasando por la pérdida de un hijo/a ó familiar.Ante esta tragedia, una de las cosas que suele ocurrir y que las personas y familias se encierren y busquen caminos diferentes en lugar de unirse y compartir el dolor dandóse el apoyo mutuo y compañía; es necesario establecer momentos para la unidad y fortaleza mutuas.Por un tiempo indefinido sobrevivir significará esforzarse por vivir un día a la vez, aunque haya altas y bajas en la montaña rusa del duelo pero si damos espacio para el perdón a otros y a nosotros mismos, gradualmente iremos en camino hacia la recuperación del equilibrio emocional y a la cicatrización de la herida.
Si la muerte trae consigo un impacto brutal que conmociona todas las áreas del ser humano, cuando ella es el resultado de un suicidio, el impacto adquiere una dimensión mas complicada por la connotación de culpabilidad, estigma y verguenza que ocasiona en el grupo familiar.Si bien, el proceso de duelo ocasionado por un suicidio sigue las mismas fases que cualquier otro, el peligro es que el elemento de culpabilidad ligado a todo suicidio retrase y altere la sana elaboración del proceso.Ante toda muerte el funeral se convierte en un elemento importante para dar un curso sano a la elaboración del duelo, no sólo porque en él la familia se confrinta con la realidad de la muerte, sino porque es allí donde se reciben los elementos básicos de apoyo. En el caso del suicidio puede ser normal ver que por diversas causas, entre las cuales priman las morales y los prejuicios que tras ellas se esconden, no se recibe todo el apoyo que se esperaría.Nos guste o no, la muerte por suicidio trae un estigma de deshonra ligado a ella.Los estudios muestran que los que tienen que soportar la muerte por suicidio suelen experimentar una depresión más profunda y mayores problemas de índole físico, que aquellos cuyos seres queridos fallecieran por otras causas.Quizás,como ya anotamos antes, la principal dificultad radica en los sentimientos de culpa. No en vano los estudiosos del tema han llegado a sostener que justamente uno de los objetivos que se propone quien se quita la vida es provocar el sentimiento de culpa en aquellos que lo rodeaban, pues quien toma tal determinación se encuentra embargado por la frustración y la rabia y quiere provocar aflicción en aquellos que, supuestamente deberían haberle prestado ayuda y, a su juicio, no lo hicieron.De este modo quien se suicida tendría tal intención de castigar a su familia, que no duda en quitarse la vida con el fin de conseguirlo. Por supuesto, hay quienes asumen que, el propósito del suicidio sería librarse a sí mismo y a la familia de dolores mayores a los que trae la pérdida de un ser querido.No importa cuáles argumentos hayan conducido a la persona a tomar tan fatal determinación, lo importante ahora no es lo que se crea o las explicaciones que se puedan tejer, pues es una de las tragedias que nunca se puede explicar o entender por completo y, como ha quedado dicho, ningún corazón quebrantado se cura con razonamientos y explicaciones.Realmente no se puede entender el pasado, pero eso ahora no debe tener mayor importancia, pues lo escencial es que aprendamos de ese acontecimiento trágico lo que necesitabamos saber sobre nosotros, sobre Dios y sobre la vida misma. Ante esto, lo mejor que podemos hacer no es encerrarnos en la pena, sino buscar apoyo en las personas más allegadas que nos permitan hablar, llorar y aun sufrir con ellas, dando lugar a la manifestación de nuestros sentimientos de rabia, frustración y autocondena, tambien es de gran ayuda buscar un grupo de apoyo y mutua ayuda y así compartir lo que sucede con otros padres y madres que están pasando por la pérdida de un hijo/a ó familiar.Ante esta tragedia, una de las cosas que suele ocurrir y que las personas y familias se encierren y busquen caminos diferentes en lugar de unirse y compartir el dolor dandóse el apoyo mutuo y compañía; es necesario establecer momentos para la unidad y fortaleza mutuas.Por un tiempo indefinido sobrevivir significará esforzarse por vivir un día a la vez, aunque haya altas y bajas en la montaña rusa del duelo pero si damos espacio para el perdón a otros y a nosotros mismos, gradualmente iremos en camino hacia la recuperación del equilibrio emocional y a la cicatrización de la herida.
sábado, 11 de abril de 2009
¡Felices Pascuas... Ellos están con el Señor!

"Dejémonos iluminar por la luz deslumbrante de este Día solemne; abrámonos con sincera confianza a Cristo resucitado, para que la fuerza renovadora del Misterio pascual se manifieste en cada uno de nosotros, en nuestras familias y nuestros países. Se manifieste en todas las partes del mundo."
(Mensaje Urbi et Orbi del Santo Padre Bendicto XVI para la Pascua de 2008)
Que resucites en el Señor y el único motor de tu vida sea el amor...¡Felices Pascuas de Resurrección!
Moranove
miércoles, 8 de abril de 2009
La Esencia del Ser

Sabrás del dolor y de la pena de estar con muchos, pero vacío...
Sabrás de la soledad de la noche y de la longitud de los días...
Sabrás de la espera sin paz y de aguardar con miedo...
Sabrás de la soberbia de aquellos que detentan el poder y someten sin compasión...
Sabrás de la deserción de los tuyos y de la impotencia del adiós...
Sabrás que ya es tarde y casi siempre imposible...
Sabrás que eres tú el que siempre da y sientes que pocas veces te toca recibir...
Sabrás que a menudo piensas distinto y tal vez no te entiendan...
Pero sabrás también:
Que el dolor redime...
Que la soledad cura...
Que la fe agranda...
Que la esperanza sostiene...
Que la humildad ennoblece...
Que la perseverancia templa...
Que el olvido mitiga...
Que el perdón fortalece...
Que el recuerdo acompaña...
Que la razón guía...
Que el Amor dignifica...
Porque lo único que verdaderamente vale es aquello que está dentro de ti, y por encima de todo esta Dios.
"Descubrelo y así hallaras la verdadera Paz"
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Padres en Proceso de Duelo es un espacio para compartir...
Te invitamos a formar parte de esta Comunidad de ayuda mutua, para Padres en Proceso de Duelo; nos une la pérdida de uno o más de nuestos hijos, así mismo aquellos hermanos, familiares que comparten con nosotros está nueva e inevitable, etapa de nuestra vida, porque después de ésto la vida nos cambia y queremos que sea para ser mejores seres humanos... y aprendamos a compartir todo...empezando por el dolor... hasta la forma como nos estamos recuperando.
Padres en Proceso de Duelo es un espacio para compartir, hablar, reflexionar y escribir nuestras experiencias vividas hasta el día de hoy...el mañana el tiempo lo dirá...
En Padres en Proceso de Duelo te proponemos un "Un cómo hacerlo" a través de 7 niveles de "Crecimiento Existencial y transformacíón del dolor"
Padres en Proceso de Duelo es un espacio para compartir, hablar, reflexionar y escribir nuestras experiencias vividas hasta el día de hoy...el mañana el tiempo lo dirá...
En Padres en Proceso de Duelo te proponemos un "Un cómo hacerlo" a través de 7 niveles de "Crecimiento Existencial y transformacíón del dolor"
Sabrás...

Sabrás del dolor y de la pena de estar con muchos, pero vacío...
Sabrás de la soledad de la noche y de la longitud de los días...
Sabrás de la espera sin paz y de aguardar con miedo...
Sabrás de la soberbia de aquellos que detentan el poder y someten sin compasión...
Sabrás de la deserción de los tuyos y de la impotencia del adiós...
Sabrás que ya es tarde y casi siempre imposible...
Sabrás que eres tú el que siempre da y sientes que pocas veces te toca recibir...
Sabrás que a menudo piensas distinto y tal vez no te entiendan...
Pero sabrás también:
Que el dolor redime...
Que la soledad cura...
Que la fe agranda...
Que la esperanza sostiene...
Que la humildad ennoblece...
Que la perseverancia templa...
Que el olvido mitiga...
Que el perdón fortalece...
Que el recuerdo acompaña...
Que la razón guía...
Que el Amor dignifica...
Porque lo único que verdaderamente vale es aquello que está dentro de ti, y por encima de todo esta Dios.
"Descubrelo y así hallaras la verdadera Paz"
Les prestaré a uno de mis hijos...
El Señor dijo:
Les prestaré a uno de mis hijos durante algún tiempo, para que lo amen mientras viva y lo lloren cuando muera. Pueden ser seis o siete años, o veintidos o veintitres.
Pero ¿Podrán cuidarlo por mi hasta que yo lo vuelva a llamar?Les alegrará con sus encantos, pero su estancia será breve.
Tendrán sus hermosos recuerdos como consuelo para su dolor.
No puedo prometerles que se quedará, ya que todo lo de la tierraregresa.
He buscado por todo el mundo verdaderos maestros y, de las multitudes que llenan las filas de la vida, Yo los he elegido a ustedes.
Le darán todo su amor sin pensar en lo infructuoso del esfuerzo.
Tampoco me odien en el momento que vaya a llamarlo, a traerlo nuevamente conmigo.
He creído escucharles decir:"Querido Señor, hagase tu voluntad. Por toda la alegría que tu hijonos traerá, correremos el riesgo del sufrimiento.
Lo abrigaremos con ternura, lo amaremos mientras nos permitas y, por la felicidad que hemos conocido, siempre te estaremos agradecidos... Pero, si los ángeles lo llaman mucho antes de lo que deseamos, soportaremos la amarga pena y trataremos de entender"
"GRACIAS SEÑOR POR LA OPORTUNIDAD QUE TUVIMOS DE TENERLOEN NUESTROS BRAZOS, HABERLO PODIDO BESAR Y DECIRLE CUÁNTO LO QUEREMOS"